¿A caso hay un tiempo determinado o una velocidad establecida cuando hablamos de relaciones?
No lo creo, o al menos, no quiero basar mis sentimientos en unas pautas previamente establecidas por una multitquud a la e le da más miedo el rechazo que el hecho de intentarlo.
Si te quiero, voy a hacerlo a mi velocidad, aunque para los demás esté superando el límite. Si te quiero, voy a hacerlo a mi manera, expresándome como sea posible aunque para mi nunca sea suficiente. Si te quiero, voy a darte todo lo que esté a mi alcance, olvidándome del miedo y la posibilidad de sufrir. Si te quiero, voy a hacerlo en el lugar o la distancia que sea, sin importar dónde estés tú o dónde esté yo. Si te quiero, que te quiero, voy a hacerlo siempre, ignorando el hecho de que no existe la eternidad.
No voy a ir siempre a la misma velocidad porque puedo arriesgarme a perderte, ya sea por dejarte atrás o ser yo la que te pierda de vista.